Esta es una descripción de un perfil psicológico de un texto de B. Villaseca.
Su herida es que no se quiere a sí mismo, porque piensa que amarse es un acto egoísta. Y que lo importante es ser buena persona, priorizando siempre las necesidades de los demás.
Cree que cuanto más ayude a la gente, más le querrán. Y que cuanto más le quieran, más feliz será. Pero en el proceso se olvida de sí mismo y de sus necesidades, se vuelve dependiente e incapaz de estar en soledad.
Considera que sabe mejor que nadie lo que necesitan los otros y suele dar consejos, echando luego en cara lo que ha hecho por la gente, con un tono de orgullo.
Hemos descripto las emociones negativas y desviaciones de este perfil. Su aprendizaje pasa por transformar su orgullo en humildad, y aprendiendo a no dejar de lado sus necesidades emocionales frente a la de los otros.
Esta personalidad en su aspecto positivo, destaca por ser humilde, generoso, bondadoso, empático, altruista, amoroso e independiente emocionalmente.
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